Milagro en el año 2019 al cumplirse 404 años del Santo Cristo de La Grita (F: A.T).
Miles de devotos rinden honor al Santo Cristo de la Grita cada año en el estado Táchira, como parte de una tradición religiosa y cultural. Esta imagen del Cristo crucificado es venerada por los fieles y se le atribuyen milagros y favores divinos.
El equipo de Entre Voces quizo compartir un testimonio de tantos, convertido en milagro, contaremos la historia de Carlos Moreno, nacido en la Grita, capital del municipio Jauregui, en el año 1940, devoto al Santo Cristo, quien relata cómo una «litografía» o afiche afianzó más la fe en Dios.
Era el año 2019, donde se celebraban 404 años del milagro del Santo Cristo, en esa oportunidad, Moreno, fue a casa de una prima llamada Elide Duque en la Grita, y le pidió le obsequiara un afiche del Santo Cristo que era original para llevarlo a Jají en el estado Mérida, lugar de residencia desde ese momento hasta la actualidad (2024), ella le dijo que era el único que conservaba, sin embargo decidió dárselo.
Es importante destacar que durante el trayecto el afiche se rompió por una de sus partes, razón por la que el devoto Moreno decide enmarcar el afiche para conservarlo, pero pasó algo curioso cuando se va a realizar dicho trabajo » había junto al roto otra litografía intacta, cosa que no era posible ya que la que me otorgaron era la única que quedaba» afirmó.
Luego de este hecho Moreno afirmó » esto acrecentó mi fe en Dios, ya que para mi es un milagro, donde yo confiadamente pedí al Santo Cristo por mi salud y la de mis familiares, junto a otras peticiones que llevaba en mi corazón y no podía creer que apareciera en mis manos otro ejemplar junto al que me obsequiaron» aseguró.
El devoto Carlos Moreno en sus manos sostiene el afiche roto.
Hasta la actualidad las dos imágenes se mantienen intactas y conservadas, y cada 6 de agosto en homenaje al Cristo Milagroso se realiza un altar para orar, agradecer por todos los favores concedidos durante el año y elevar una petición especial por cada intención familiar.
Cada 6 de agosto desde 1610, devotos se reúnen en la Grita para orar delante del Santo para que interceda ante Dios por cada petición especial, además de agradecer con signos como pago de promesas por favores concedidos.
(C.N.P 25.528)