En una visita oficial a Jerusalén este jueves, 23 de octubre, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, declaró que la administración estadounidense mantiene una postura “positiva y segura” respecto al avance del acuerdo de alto el fuego en Gaza.
Sin embargo, advirtió que aún existen “obstáculos importantes” que podrían dificultar la consolidación de la tregua entre Israel y Hamás.
LEA TAMBIÉN: «LA TAREA NO ESTÁ TERMINADA«: LA EXIGENCIA DE TRUMP A HAMÁS PARA AVANZAR Y COMPLETAR ACUERDO SOBRE GAZA
«Ahora tenemos más trabajo por delante, pero nos sentimos muy positivos. Estamos logrando buenos avances. (…) Nos sentimos muy positivos y confiados de que lo lograremos a pesar de los sustanciales obstáculos. Lo lograremos», sostuvo Rubio en una conferencia de prensa sin preguntas celebrada en Tel Aviv junto al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Asimismo, Rubio enfatizó: «Nadie se está haciendo ilusiones. Ya hicimos lo imposible una vez. Y tenemos la intención de seguir haciéndolo. Nos sentimos confiados y positivos sobre el proceso que se está logrando. También tenemos una visión clara de los desafíos».
«PRIORIDAD MÁXIMA»
El jefe de la diplomacia estadounidense subrayó que Trump convirtió el acuerdo —propuesto por él mismo— en una “prioridad máxima”, evidenciada por las recientes visitas a Israel del vicepresidente de los Estados Unidos, JD Vance, el enviado especial Steve Witkoff y el yerno y asesor de Trump, Jared Kushner.
«El vicepresidente acaba de irse. Nos hemos cruzado en el camino. Y ahora estoy aquí porque esto es una prioridad. Es un logro muy importante, pero hay más trabajo por hacer y logros aún mayores por delante. Y por eso estamos aquí, para trabajar en eso», insistió el secretario de Estado de EEUU durante su intervención.
Por su parte, Netanyahu describió a Rubio como «un extraordinario amigo de Israel» y señaló que tienen un objetivo compartido que es «promover la paz».
«Todavía tenemos desafíos de seguridad, pero creo que podemos trabajar juntos y, al hacerlo, abordar los desafíos y aprovechar las oportunidades. Hay muchas de ambas», expresó.

TREGUA «FRÁGIL»
La tregua, que lleva cerca de dos semanas en vigor, ha sido considerada frágil por diversos actores internacionales. Uno de los puntos más sensibles en las negociaciones es la situación de los rehenes y la posible anexión de Cisjordania por parte de Israel.
Rubio reiteró que cualquier movimiento unilateral por parte del gobierno israelí podría poner en riesgo el apoyo de EEUU, una advertencia que también ha sido respaldada por el mismo Trump.
De hecho, se difundió una advertencia de Trump a Israel en relación con las iniciativas legislativas destinadas a anexar Cisjordania, territorio palestino. En una entrevista telefónica con Time realizada el 15 de octubre y publicada este mismo jueves, el mandatario subrayó: “Eso no ocurrirá porque di mi palabra a los países árabes. Israel perdería todo el respaldo de Estados Unidos si eso sucediera”.
La declaración se produjo tras el avance en el parlamento israelí de dos proyectos de ley que abren la puerta a la anexión, provocando la condena de más de una docena de países árabes y musulmanes, entre ellos Arabia Saudita, Jordania y Turquía, según un comunicado conjunto difundido por medios estatales de la región.
DENUNCIAS DE HAMÁS
A pesar de los gestos diplomáticos, la tensión continúa elevada sobre el terreno. El gobierno de Hamás en Gaza denunció “decenas de violaciones” del acuerdo por parte de las fuerzas israelíes, citando tiroteos contra palestinos que cruzaron a zonas controladas por el ejército, en los que al menos 40 personas habrían muerto.
Además, tras un enfrentamiento ocurrido el domingo entre tropas israelíes y presuntos combatientes islamistas en el sur de Gaza, el ejército israelí llevó a cabo bombardeos que, según el Ministerio de Sanidad del enclave, provocaron la muerte de al menos 45 palestinos.
Por otra parte, Hamás mantiene bajo su custodia los cuerpos de 13 rehenes, un factor que las autoridades israelíes consideran determinante para la continuidad del acuerdo.